Un pozo de agua o una captación de aguas subterráneas  es una perforación vertical que permite la explotación del agua freática contenida en los intersticios o las fisuras de determinadas rocas del subsuelo. A estas bolsas de agua se las denomina acuífero.

Los pozos o perforaciones para captación de aguas subterráneas se pueden dividir en dos grupos:

• Pozos.-  Son perforaciones de gran diámetro. Normalmente de 1 a 6 metros de diámetro y de poca profundidad. Sus paredes están revestidas con ladrillos o con tuberías de hormigón prefabricado.

Este tipo de perforación se utiliza cuando el acuífero está a poca profundidad y la transmisibilidad del mismo es pequeña, es decir, cuando hay poco agua en el acuífero. Este sistema permite utilizar la propia perforación como un depósito para almacenar el agua que poco a poco se va filtrando por las paredes del mismo.

 

• Sondeos.-  Son perforaciones de pequeño diámetro. Generalmente de 140 mm  a  600 mm. de diámetro. Este sistema permite alcanzar mayor profundidad que los pozos para así poder acceder a las aguas que se encuentran más profundas. Su revestimiento se solían hacer con tubería de acero al carbono, pero en la actualidad se utiliza tubería de P.V.C.

Este tipo de perforación se utiliza cuando el acuífero está más profundo y se encarece la construcción de un pozo o cuando la transmisibilidad del acuífero es grande.

Cuando desde un sondeo sin necesidad de ningún elemento extractor sale agua a la superficie, se denomina  Pozo Artesiano.